Para algunas personas, resulta más sencillo sentirse satisfechas a través del teletrabajo. Son independientes y se sienten cómodas con la falta de contacto social, entre otros rasgos.
Si bien el teletrabajo existe desde hace 30 años, hasta hace unos meses todavía era muy poco frecuente encontrar esta modalidad laboral.
De la noche a la mañana, sin ninguna preparación, millones de personas en todo el mundo se vieron forzadas a realizar trabajo a distancia, para continuar su actividad productiva en medio de la contingencia ambiental.
Sin embargo, tanto las empresas como los trabajadores necesitan cumplir algunas condiciones básicas para que el home office sea productivo; más aún, para que resulte una estrategia que pueda ser mantenida a largo plazo.
Al respecto, el psiquiatra Guillermo Gabler destacó que no todas las personas pueden ser felices con el trabajo remoto, debido a rasgos psicológicos que son incompatibles con esta modalidad.
Características del teletrabajador ideal
Por definición, el teletrabajo es toda actividad laboral que se realiza a distancia, con la ayuda de tecnologías de la información, explicó Gabler. En concreto, para las personas representa una dinámica social muy distinta a la del trabajo presencial.
Para empezar, el home office se realiza sin supervisión directa y sin socialización con otros compañeros. Además, admite una mayor flexibilidad de horarios y se mide por los objetivos alcanzados.
Gabler refirió que las personas con estos rasgos suelen adaptarse mejor al trabajo remoto y están más protegidos frente al estrés laboral:
- Alta motivación
- Buen manejo de tareas asignadas
- Alto rendimiento
- Independencia (se ha definido como el factor protector más importante respecto al teletrabajo)
- Comodidad con la falta de contacto social
- Buenas habilidades para gestionar el tiempo
- Capacidad de concentración
- Habilidades comunicacionales
- Confiable, no requiere supervisión
- Asertivo: sabe decir que no y establece prioridades
Un entorno de teletrabajo saludable
El teletrabajo llegó para quedarse y es una modalidad que debemos defender, pues se trata de una medida incluyente, con gran potencial para emplear a personas discapacitadas y disminuir el tráfico vehicular, señaló Cristian Salazar en el webinar “Teletrabajo y comunicación efectiva”.
“De nosotros va a depender que el teletrabajo se sienta como una modalidad permanente, y no como una medida temporal ante la crisis”, destacó el docente de la Universidad Autónoma de Chile.
Por eso, el experto en comunicación emitió una serie de recomendaciones útiles tanto para las personas que se sienten incómodas con el home office, como para aquellas que desean trabajar así de forma permanente.
- Genera una rutina de teletrabajo y cúmplela
- Divide tu jornada en dos periodos: mañana y tarde
- En las videollamadas, saluda con alegría al comenzar una reunión
- Incorpora pausas activas en cada jornada, en donde realices ejercicios de estiramiento o busques momentos de conversación
- Respeta tus horas de alimentación y desconexión
- No trabajes más de tu jornada laboral diaria
- No sigas trabajando en la noche
- Ten empatía por los compañeros que asimilan de manera más lenta el uso de las tecnologías
“Muchos estamos teletrabajando sin tener el perfil o las facilidades”, advirtió Salazar. La buena noticia es que, en todos los casos, los empleadores pueden fomentar las condiciones para que el teletrabajo sea productivo y genere bienestar entre todas las personas.